El shojo es uno de esos géneros que ya casi ni veo. Sí, vi
muchísimos en su tiempo pero ahora es como de esas series que no me llaman
mucho la atención cuando salen porque me parecen de lo más estereotipadas. Sin
embargo, checando las series que saldrían esta temporada me topé con que la
segunda parte de un anime que me empecé hace tiempo y bueno, ¿por
qué no? Luego de terminarme la primera temporada prácticamente de una sentada
voy a hablar un poco de Blancanieves (aunque todavía no sé en qué se parece a
Blancanieves) con el cabello rojo.
Ficha Técnica:
Nombre: Akagami no Shirayuki-hime
Año: 2015
Episodios: 12
Estudio: BONES
Géneros: Shojo, Fantasía, Romance
Sinopsis: Shirayuki es una bella muchacha pelirroja, algo
muy extraño en su país, que trabaja como curandera. Ante la insistencia del
príncipe del país en desposarla, Shirayuki decide huir. Es entonces cuando
conoce a Zen, el príncipe de un país vecino al suyo. A pesar de su juventud,
Zen sabe cómo hacerse respetar por sus conciudadanos, lo que lleva a Shirayuki
a convertirse en la médico de la corte.
Como dije, el género shojo a estas alturas es algo que a
duras penas toco, luego de tantas series la cosa se vuelve algo… cliché, aunque
no digo que todavía no se puedan encontrar series que valgan la pena.
Akagami no Shirayuki-hime es una historia que podría
calificar como “linda” o “dulce”, y que no va mucho más allá. No, no tiene un
guion inteligente ni los personajes más destacables a pesar de que ninguno me
haya desagradado, es simple y llanamente uno de esos animes con los que puedes
darte un respiro y deleitarte con una historia romántica y ligera.
Nuestra protagonista Shirayuki, me dejó un buen sabor en la
boca al no ser el típico personaje sin cabeza y llorón que juega como víctima
tres cuartas partes de la serie. Al contrario, si bien el papel de “damisela en
peligro” es inevitable a veces, se supo defender por sí misma como personaje al
tener el suficiente desarrollo con sus metas y una personalidad firme que me
gustó mucho. Luego tenemos a su compañero principal, el príncipe Zen que es un
príncipe con todas sus letras; y junto a Shirayuki ambos forman una parejita de
lo más encantadora que me sacó un “Aww” de vez en cuando.
Otros personajes como Mitsuhide, Kiki y Obi también de lo
más divertidos pero les faltó un desarrollo más razonable a veces pareciendo
que sólo flotaran alrededor de los protagonistas sin ninguna otra importancia
que estar ahí, cosa que me hubiera gustado la hubieran profundizado más y así
armar una trama un poco más fuerte.
Aunque lo que me gusta de Akagami tal vez sea eso, que es
algo simple que no da muchas vueltas y GRACIAS al cielo no tiene la típica
tonelada de drama novelesco que acostumbran a tener este tipo de animes. La
serie es un proceso en el que podemos conocer más al reino de Clarines, un
punto a favor que me ha parecido original el aspecto medieval que tiene la
serie, y ver a los personajes envueltos en situaciones que los hacen crecer
progresivamente (como a Shirayuki y su carrera como herborista o a Zen y el
capítulo de su pasado, etc).
NOTA: 5.5/10
BONES siempre tiene la maravilla de que es muy constante con
sus trabajos.
El diseño de personajes encaja perfectamente con la trama,
siendo colorido, bonito, me ha agradado mucho a pesar de ser bastante plano, pero la calidad pudo ser mejor sobre todo con un poco más de cuidado para con el nivel de detalle que se perdía constantemente.
Quería mencionar también la variedad y detalle de los
fondos, introduciéndonos a este mundo medieval con un estilo muy propio de la
época y escenas que no tienen que tener efectos especiales ni luces
estrafalarias para ser lindas. Simple, pero lindo.
NOTA: 6.5/10
“Yasashi Kibou” cantada por la mismísima seiyuu de
Shirayuki: Saori Hayami es un opening que ni pegajoso ni movido pero te da la
idea instantánea de lo que la serie será, siendo un tema muy calmadito. Lo
mismo pasa con el ending “Kizuna ni Nosete” aunque preferí este que el opening
en cuestión de gustar puesto que tiene más energía que el primero.
La banda sonora parece sacada de una película de princesas,
de esas con temas romanticones e inspiradores. Me parece cómico compararla a la
de los filmes de época de Hollywood, pero al escucharla fue lo primero que se
me vino a la mente. No tiene muchos momentos importantes ni destaca demasiado,
pero se hace notar y uno puede decir que “está ahí”.
Osaka Ryota y Saori Hayami hacen una espléndida pareja. Ambos
tienen esa tonalidad de voz de lo más dulce y tranquila que los hace combinar
instantáneamente.
NOTA: 5.5/10
Este es uno de esos animes “normalitos” pero al fin y al cabo agradables. Que te deja un buen feeling viéndolo y empieza débil pero toma
un poco más de forma en los episodios siguientes. Nos cuentan una historia de
amor lo suficientemente simpática y tierna pero sin tener esos tonos rosas chillones
que producen diabetes, más bien presentándonos lo que yo considero de los
mejores romances que he visto en shojo. Si quieren ver una serie de este género
para pasar el rato, preferiría ésta a muchas.
NOTA: 6/10
NOTA FINAL: 5,8/10
Quiero acabar este anime, pero no sé cuándo me pondré a ello porque no es uno demasiado destacable y puede ser también muy cliché, tanto por la protagonista como por lo rápido que se encariñan los personajes con ella. Sin embargo, sí que puede ser entretenido y quiero hacerle una reseña.
ResponderEliminarMuchas gracias por la entrada :)
¡Un saludo!
¡Gracias por comentar! Este anime es algo que se puede ver a la ligera, así que sin prisas. Es regular, no es una obra maestra pero en mucho momentos es tan encantador que no puedes dejarlo pasar por alto. Espero poder leer tu reseña entonces :)
Eliminar¡Besos!
Hola Mar:
ResponderEliminarCreo que soy una de esas pocas personas que me encanta Shirayuki. Adoro el anime, la manera en la que está contado y en definitiva todo del anime. Estoy de acuerdo que siendo Shojo pues mucho más no se va a profundizar, pero es tan bonito verlo. Es cierto que los otros personajes podían profundizar en su historia pero yo me conformo con ver a Shirayuki y a Zen, es que hermoso verlos.
Un beso ^^
¡Mindy! Gracias por comentar y seguirme :)
EliminarPodemos decir que yo también le tengo cierta debilidad al anime. Es de los pocos shojos que de verdad disfruto y termine sin quejarme ni una sola vez del coeficiente intelectual de la protagonista (es que Shirayuki de verdad es encantadora). Jaja, Shirayuki y Zen son de mis parejas favoritas, los adoro.
¡Besos! Nos leemos :D